EL
AMOR
Un estudio para la juventud de hoy
Mateo 22:37-39
“Jesús
le dijo: Amarás al Señor tu Dios con
todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y
grande mandamiento.
Y
el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo
como a ti mismo”[1].
Los
griegos le ponen nombre casi a todo, aun el alfabeto castellano tiene
características del alfabeto griego. Fueron los griegos que dividieron el amor
con distintos nombres: Fileo, Eros, Ágape… y de manera romántica habían
construido el mito de un dios que era mitad humano y mitad animal, con arco y
flecha, flecha que lanzaba a sus interesados, hombres y mujeres, los cuales
eran encantados por el llamado amor. ¿Será ese amor el verdadero amor?
En
realidad los griegos no fueron los únicos en conocer el amor, otras culturas
tenían su visión de mundo, en este sentido la cultura semita, describía un amor
no despedazado, sino un amor único que abarcaba todos los aspectos de la vida.
Ese amor tenía tres elementos que trataremos de conocer. Amor a Dios, amor al
prójimo y amor a uno mismo.
El amor contemporáneo
Por
contemporáneo entenderemos “moderno”, ese amor moderno, ha sido desfigurado, el
hombre sea centrado en sí mismo, con la falsa frase del individualismo; que
dicho sea de paso nunca existirá tal expresión, ya que somos seres
relacionales, no podemos vivir una vida fuera de la realidad común, por
ejemplo: necesitamos del panadero, de la tortillera, de la pupusera, zapatero,
del mercado… en este sentido el niño o niña cuando nace, nace en un mundo
construido, le educa, le forma o le programa para que responda consiente o
in-conscientemente, a tal grado que se le imponen necesidades irreales,
intereses opuestos a las verdaderas necesidades humanas. Podemos decir que se
ha instalado un amor irreal. Por ejemplo: el falso amor en el sexo, muchos
jóvenes son activos sexualmente, renuncian al esfuerzo, a la superación de una
vida diferente.
Nuestro
país El Salvador necesita de hombres y mujeres que se superen en lo académico,
que saquen su licenciatura, ingeniería, medicina, y alguna especialidad, que le
sirva a su nación, a su pueblo. Pero la realidad de nuestro pueblo, pueblo
sufriente históricamente, es que una gran cantidad de jóvenes son padres de familia,
repiten el mismo patrón de vida de sus antepasados; y lo peor de todo, es que
hay víctimas, los niños y las mujeres, y todo por una probadita del supuesto
amor. El internet y los teléfonos móviles han dado un golpe mortal en nuestro
tiempo.
“El
hombre moderno sea transformado en un artículo; experimenta su energía vital
como una inversión de la que debe obtener máximo beneficio, teniendo en cuenta
su posición y la situación del mercado de la personalidad. Está enajenado de sí
mismo, de sus semejantes y de la naturaleza”[2],
por supuesto que esta crítica tiene que ver con un modelo económico que impulsa
al consumismo. “…toda la humanidad está ansiosa de devorar, mediante el
consumo…la lógica del consumo es la destrucción del hombre…”[3]. El
ser humano ha dejado de tener valor y ha pasado hacer la cosa, sin valor, lo de
afuera, lo comercial le ha sustituido, ha tomado su lugar de importancia.
El
falso amor no es sino, un amor creado a imagen y semejanza de los más
poderosos, que manejan los medios de comunicación, los dueños de las grandes
empresas multi-millonarias. Son ellos los que manipulan la pobre alma de los y
las pobres, que caen en sus garras y que nunca escapan de su maldición, cayendo
en el eterno retorno. Conocer la verdad nos hace libres, para no seguir siendo
esclavos, para renunciar al estilo de vida que se impone. Martín Luther King en
su libro La fuerza de amar, expone claramente algo que la gente rechaza: “nada
molesta más a la gente que tener que pensar”[4].
Por eso, este día te invitamos a pensar sobre tu vida, ¿qué quieres ser? ¿Qué
será de ti en 12 años?
El
psicoanalista Erich Fromm, escribió un libro titulado El Arte de Amar,
argumenta que el amor es un arte, que como la medicina tiene su teoría y su
práctica; así el amor cuando se conoce y se practica, es que ya está listo para
ejercer.
El
verdadero amor tiene que ver con el triángulo que el versículo de Mateo
expresa: Dios, prójimo y yo.
Dios,
expresión que engloba cualquier ser creado o revelado al hombre: musulmanes,
antiguas tradiciones pre-colombinas, budistas, judíos, hinduistas, sintoístas,
entre otras. Tratan de vivir su fe, fe expresada en libros “divinos”, tradiciones,
costumbres, pero tratan de vivir su fe. El cristianismo, que es hijo del
judaísmo, también expresa su fe por medio de su literatura, sus prácticas,
aunque con honestidad académica, existen muchas formas de expresión del
cristianismo: pentecostales, católicos, bautistas, presbiterianos, testigos de
Jehová, luz del mundo, entre otros. Todos ellos tratan de acercarse a las
Escrituras e imitar al que hace posible la existencia de nuestra común fe:
Jesús de Nazaret. Que la fe de Jesús viva de verdad en nuestras vidas, que
nuestras acciones estén de acorde a nuestra fe, que Jesús de verdad viva en
cada corazón, en cada ser humano que dice seguirle. Dios no tiene sentido para
los hombres, sino es manifestado por su pueblo, por sus hijos e hijas. El amor
a Dios es un arte, debe practicarse. Pero para eso, debo de conocer mi fe, y
esa fe proviene de la Palabra de Dios. Los evangelios presentan la vida, la
acción, la muerte y la resurrección de Jesús de Nazaret. Nos preguntamos ¿Cuál
es la voluntad de Dios? El alemán Dietrich Bonhoeefer en su libro de Ética nos
dice: “Examinar cual es la voluntad de Dios es solamente posible a raíz del
saber acerca de la voluntad de Dios en Jesucristo… sólo en Jesucristo se puede
examinar cual es la voluntad de Dios”[5]. Conocer el evangelio es el primer paso para
acercarnos a Jesús, a Dios.
Una
comparación absurda pero válida de amar a Dios, es como la única moneda que he perdido, que me afano en
buscarla hasta encontrarla, de esa forma debe ser la búsqueda del hombre y la
mujer, al encuentro de Dios en humildad. Dios es como el viento que no lo vemos
pero lo sentimos, el ser humano le percibe. Y que mejor momento que hablar con
él a “solas”, me expreso ante él tal cual soy. Y cuando leo su Palabra, me
habla a mí. En Dios está la plenitud del ser humano.
Amor al prójimo
El
amor al otro, ha sido sustituido por el amor a los objetos; y por amor a esos
objetos el hombre mata, mata por un celular, por unos dólares, por los zapatos,
por el carro, roba, extorsiona y más. Pero existe un pensamiento que se opone a
la des-figuración del ser, aunque es más que solo pensamiento, también es
acción, su nombre: Jesús de Nazaret. En Jesús el otro (el hombre o mujer), tiene
sentido. Especialmente aquellos que han sido desechados por el sistema, sistema
económico que excluye, a los que ya no les favorecen. Y esos desfavorecidos
regularmente son: Los hermanos y hermanas de la tercera edad, los enfermos, los
niños y las niñas, los discapacitados, los pobres y las pobres, el indigente,
los perdidos por algún vicio, entre otros. Estos no le sirven al sistema económico
capitalista, le estorban, de ahí que las políticas están enfocadas en aumentar
el “ingreso económico” y menos en ayuda social. El gran escritor ruso, León
Tolstoi, escribió un cuento llamado “Mil Monedas de Oro”:
“Un
hombre rico quiso repartir mil monedas de oro a los pobres, pero como no sabía
a cuales pobres debía darlas, fue en busca de un sacerdote, y le dijo:
_Deseo
dar mil monedas de oro a los pobres, más no sé a quiénes. Toma el dinero y
distribuidlo como queráis.
_El
sacerdote le respondió:
_Es
mucho dinero, y yo tampoco sé a quienes darlo, porque acaso a unos daría
demasiado y a otros muy poco. Decidme a cuales pobres es preciso dar vuestro
dinero y qué cantidad a cada uno.
_El
rico concluyó:
_Sino
sabéis a quien dar este dinero, Dios lo sabrá: dadlo al primero que llegue.
_En
la misma parroquia vivía un hombre muy pobre, que tenía muchos hijos y que
estaba enfermo y no podía trabajar. Este pobre leyó un día en los salmos: Yo
fui joven y he llegado a viejo, y no he visto a un justo desamparado y sus
hijos reducidos a mendigar.
_Pensó
el pobre ¡hay de mí! Estoy abandonado de Dios, y, sin embargo, no he hecho
nunca mal a nadie… Iré en busca del sacerdote y le preguntaré cómo es posible
se encuentre una mentira semejante en las Escrituras.
_Y
salió en busca del sacerdote; y al presentarse, el sacerdote se dijo:
_Este
pobre es el primero que llega: le daré las mil monedas del rico”[6].
El cuento expresa una
cosa que es real en estos tiempos, difícilmente habrá un rico que se despoje de
tanto para ayudar a los pobres, por su interés, su centro, su amor es la
acumulación del capital.
En este sentido Jesús
quiere que el ser humano sea sensible a la vida del otro. Su acción en el mundo
tenía que ver con una acción, con un responder responsablemente en favor de mi
hermano y mi hermana, sus hechos testifican que Jesús tenía una preferencia por
los más desprotegidos: enfermos, ciegos, mudos, cojos y aun los muertos,
vindicando sus vidas, restaurándolos.
La parábola del samaritano,
reflejada la tarea de cada ser humano en el mundo:
Lucas 10:30-37
“Tomando
Jesús la palabra, dijo: Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó y cayó en poder
de ladrones, que lo desnudaron, lo cargaron de azotes y se fueron, dejándole
medio muerto. Por casualidad, bajó un sacerdote por el mismo camino, y,
viéndolo, pasó de largo. Asimismo un levita, pasando por aquel sitio, lo vio
también y pasó adelante. Pero un samaritano, que iba de camino, llegó a él, y,
viéndolo, se movió a compasión, acercóse, le vendó las heridas, derramando en
ellas aceite y vino; lo hizo montar sobre su propia cabalgadura, lo condujo al
mesón y cuidó de él." A la mañana, sacando dos denarios, se los dio al
mesonero y le dijo: Cuida de él, y lo que gastes, a la vuelta te lo pagaré. ¿Quién
de estos tres te parece haber sido prójimo de aquel que cayó en poder de
ladrones? EL contestó: El que hizo con él misericordia. Contestóle Jesús: Vete
y haz tú lo mismo”[7].
Existe
una falta o pecado del hombre hacia Dios, que no es denunciada en los pulpitos
donde se reúnen miles de personas para ser edificados en la Palabra y esa falta
es: Omisión. Hipocresía dijo un religioso alemán que murió ejecutado por el
ejército hitleriano en el año 1945 su nombre fue Dietrich Bonhoeefer. Este
hermano alemán ayudó a muchos judíos que eran perseguidos por ser practicantes
de su religión, pero no solamente los judíos fueron perseguidos y asesinados
sino todos aquellos que se oponían a las políticas expansionistas de Hitler,
católicos, evangélicos, testigos de Jehová, entre otros (los cuales por falta
de estudios no han salido a la luz), pero fueron hermanos que se identificaron
con los más sufrientes, unos de forma pasiva y otros de forma activa,
manifestándose en contra de la tiranía.
En
nuestro querido El Salvador, uno de los grandes de nuestra madre tierra, mal
comprendido en su tiempo, que debe ser motivo de estudio y análisis, Alberto
Masferrer, humanista incansable por establecer un mínimo vital para cada
salvadoreña y salvadoreño. Otro personaje digno de mencionar es David J.
Guzmán, impulsador de la educación en el sector desprotegido y explotado de
nuestra población, nativos, mal llamados “indios”. José Castellanos un militar,
que como delegado diplomático en Europa (en los años 1931 aproximadamente), se
destacó por salvar a miles de judíos dándoles salvos conductos, aunque fue
reprendido y su vida corrió peligro por Maximiliano Hernández Martínez,
presidente militar de nuestro país, en los años 1931 en adelante. José
Castellanos el único centroamericano en ser parte de los justos de las naciones
en Jerusalén. El amor al prójimo debe de ser una tarea para todo ser humano,
religioso o no religioso.
El
precio por la defensa de los más desfavorecidos no siempre es reconocido,
porque los ideales de los hombres de hoy no tienen que ver con la lucha por la
dignidad del hombre y la mujer sino por los intereses ajenos a nuestras
necesidades verdaderas. Por eso, los que se dedican a luchar por el prójimo no
le es fácil; pero no imposible. El buen discípulo se identifica con su maestro,
conociendo su pensamiento y sus acciones para que el resultado del discípulo
sea otro semejante al maestro.
Amor a si mismo
Erich
Fromm nos sorprende con su visión del ser humano: “El amor así mismo está
inseparablemente ligado al amor a cualquier otro ser”[8]… “el
individuo egoísta no se ama demasiado, sino muy poco; en realidad se odia”[9].
Egoísmo
y amor así mismo se contraponen, no son lo mismo, uno es bueno (a favor del
ser), el otro maligno.
Un
ejemplo interesante sobre el egoísmo es: el joven deja sus estudios por “amor”
o porque un “amigo” me involucra en malas compañías. Los padres tratan de sacar
al hijo o a la hija adelante, pero eso no le importa al joven, piensa en su
momento, en el deleite de sus deseos. Lamentablemente más adelante se da cuenta que su camino no era
el mejor.
Otro
ejemplo pero desde el amor a uno mismo: el joven que no deja de estudiar, no
deja de prepararse, saca su bachillerato, después saca su título universitario
y todavía más, saca una especialidad y obtiene un excelente empleo o crea su
propia empresa, su salario le ayuda para bendecir a sus padres, a su esposa e
hijos. Este tipo de amor por uno mismo nos ayuda a pensar en el otro, pero no
descuidándose, sino aplicándose en la vida.
Hace
unos días atrás pasó una carrosa fúnebre frente a la iglesia, lo extraño de eso
es que había jóvenes tras la carrosa, vestidos con uniforme de estudiante. Indagué
a los que acompañaban: ¿quién es el muerto? “uno de los jóvenes que asesinaron
de la escuela tal” me contestaron. Salí inmediato para el cementerio y en la
entrada se encontraban dos personas y les pregunté ¿adónde enterrarían al joven
de la escuela?, uno de los señores con sus ojos llorosos me dijo “yo soy el
abuelo y lo llevaran al sector ocho”. Ya en el puesto uno de los hermanos que
predicaban a viva voz decía: “ya nada podemos hacer, ¿qué puede hacer el hombre?,
nada” decía a la multitud, que escuchaba de manera reflexiva. Cuando terminó
pedía la palabra, y les dije a los asistentes de que “sí podemos hacer algo,
con el asesinado ya nada; pero con los vivos, sí, sí podemos hacer algo,
negándonos a la participación en el camino del mal, todo aquel que participa en
el camino del mal se convierte en un asesino”; algunos piensan que la vida es complacer
todos mis deseos o caprichos, el joven asesinado no tenía que estar en esa
condición, sino practicando el futbol o básquetbol, o divirtiéndose con un
video juego, estudiando, o viendo el partido del alianza con el águila, pero
decidió otro camino, el cual le llevó a la muerte.
La
vida es un don de Dios, por lo tanto debemos apreciarla.
La
mujer como el hombre debe de aprender a amarse a sí mismo, pero de verdad,
dándose dignidad, respeto; sino, nos lamentaremos más tarde.
Amar
a Dios, al prójimo y a nosotros mismos es el amor que Dios quiere para todos.
Que
Dios guíe nuestro camino hoy y siempre, amén.
Bibliografía
Biblia Nacar Colunga
Biblia Nueva Versión
Internacional 1999
Erich Fromm “El arte de amar”,
Editorial Paidós Ibérica S.A. Barcelona 1980
Franz Hinkelammert “Las armas
Ideológicas de la Muerte”, Departamento Ecuménico de Investigaciones, San José
Costa Rica
Martin Luther King “La
Fuerza de Amar” Editorial Acción Cultural Cristiana. Madrid 1999
Dietrich
Bonhoeefer, “Ética” Editorial Trotta, S.A. Madrid 2000
León
Tolstoi “cuentos escogidos” Editorial Porrúa, México D.F. 2007
[1]
Biblia Nueva Versión
Internacional 1999
[2]
Erich Fromm “El arte de
amar”, Editorial Paidós Ibérica S.A. Barcelona 1980 p.103
[3]
Franz Hinkelammert “Las armas
Ideológicas de la Muerte”, Departamento Ecuménico de Investigaciones, San José
Costa Rica p.51
[4]
Martin Luther King “La Fuerza
de Amar” Editorial Acción Cultural Cristiana. Madrid 1999 p.16
[5]
Dietrich Bonhoeefer, “Ética”
Editorial Trotta, S.A. Madrid 2000 p.252
[6]
León Tolstoi “cuentos escogidos” Editorial
Porrúa, México D.F. 2007 p.301
[7]
Biblia Nacar Colunga
[8] Erich
Fromm, op. Cit., p.63
[9]
Ibíd.
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